5 ideas para una escapada romántica en San Valentín

Si crees que el 14 de febrero es un día como otro cualquiera, en el que no tienes por qué demostrar nada a tu pareja… puede que necesites (urgentemente) algunas ideas. No tienes excusa: ¡a todos nos gusta que nos sorprendan, sea o no una fecha señalada!   

Las posibilidades para una escapada romántica son ilimitadas y se adaptan a cualquier bolsillo. Solo necesitas imaginación y, por supuesto, ganas de compartir momentos inolvidables con tu pareja. Veamos algunas opciones.

 

¿Buscas intimidad y naturaleza?

Piensa en una cabaña en el bosque, por ejemplo (o colgada de un árbol, si no tenéis problemas de vértigo). Hay muchas opciones de hoteles rurales que ofrecen la posibilidad de pasar un fin de semana rodeado de árboles, silencio y aire puro. También existen los llamados hoteles burbuja, donde puedes disfrutar de un lujo que, si vives en una ciudad, queda fuera de tu alcance: un cielo nocturno cubierto de estrellas.

 

Hoteles para sentirse bien

Un buen jacuzzi puede marcar la diferencia a la hora de plantear un fin de semana romántico: las tensiones y el estrés tienen que quedar atrás. Se trata de relajarse y dejarse llevar. Para una escapada propiamente wellness existen, además, todo tipo de opciones para sesiones de spa que os dejarán como nuevos. El uso que le deis a vuestras energías renovadas ya depende de vosotros.

 

Viajes relámpago y de ensueño

Hay destinos que están mucho más cerca de lo que pensamos, sobre todo si consultamos a menudo (y con tiempo) las mejores ofertas. Las opciones más buscadas en San Valentín suelen ser Roma, París y Venecia. Pero no hay que descartar las ideas menos obvias: desde un fin de semana en Reikiavik (Islandia), donde se puede disfrutar de un paisaje increíble, hasta una visita tranquila a algún pueblo de las Islas Baleares, que ofrecen alternativas culturales y gastronómicas en esta época del año.

 

¿Compartís el espíritu aventurero?

Si estáis de acuerdo en optar por un tipo de experiencia más intensa que escoger un postre exótico, piensa en actividades que os permitan descargar adrenalina. ¿Qué tal apuntarse a unas jornadas de senderismo y orientación en la naturaleza? ¿Habéis pensado alguna vez en practicar parapente y nunca encontráis el momento? Hay quien preferirá una opción clásica como el esquí, pero las posibilidades incluyen desde un paseo en globo por la Toscana hasta el descubrimiento de otro tipo de escalada: la espeleología.

 

Para amantes del cine y la literatura

Cualquier viaje a Nueva York puede convertirse en un recorrido por la historia del cine, del mismo modo que una estancia en Verona remite, sin duda, a recordar a Romeo y Julieta. Sin salir de España puedes visitar varios castillos y fortificaciones que han salido en Juego de Tronos (desde Castellón hasta Almería, pasando por el Cabo de Gata). Si tu presupuesto te impide ir muy lejos, siempre puedes encontrar un lugar cercano que os aporte instantes que valga la pena compartir. Es cuestión de saber buscar.

 

Lo importante es querer

Ya que hablamos de costes, no dejes que eso se convierta en un obstáculo. Piensa en una opción que solo requiera inventiva y mucho amor. Prepara la mejor cena que seas capaz de imaginar. Escoge ese vino que solo reservas para las ocasiones especiales. Programa una sesión de cine que incluya alguna joya no disponible en plataformas digitales (busca en una biblioteca, que siguen existiendo). Presta atención a los detalles. Puede que sea la mejor escapada romántica de vuestra vida (y sin necesidad de salir de casa).