Relojes suizos: el lujo de tener el tiempo en tus manos

¿Cuántas veces has consultado la hora en el móvil… y unos segundos después, ya has olvidado qué hora era?

Puede que ni siquiera hayas llegado a visualizar ese número que, aunque siempre está presente en la pantalla de tu Smartphone, tiene que competir con todo el caudal de información que intenta captar tu interés.

El simple hecho de leer la hora en la esfera de un reloj de pulsera obedece a un gesto diferente. Es un momento de pausa en el día a día, o un instante que precede a un cambio de rumbo.

Es, en definitiva, un tiempo de calidad que te pertenece en exclusiva. Todo un lujo. Sobre todo, si tu reloj es el resultado de una combinación de diseño, tecnología y alta joyería.

Cuando pensamos en un reloj valioso, sin duda nos viene a la mente el concepto de «reloj suizo». Es una asociación inevitable, que viene avalada por la dedicación de generaciones de maestros relojeros a lo largo de los siglos.

La denominación «Swiss Made», surgida en el siglo XIX, sigue siendo la más prestigiosa del mundo en la industria relojera. Su estatus se ha forjado gracias a los hallazgos en la tecnología de la precisión, al esmero en la elección de los materiales y al cuidado artesanal que da forma a sus exquisitos diseños.  

En la personalidad de un reloj suizo, todos los detalles cuentan: desde una correa de acero o de piel hasta una esfera con incrustaciones de piedras preciosas, pasando por un diseño basado en piezas de oro de 18 quilates.

Es un objeto que se adapta a cualquier estilo y puede asociarse tanto a ambientes clásicos como a espíritus aventureros. De hecho, los primeros pasos sobre la Luna se cronometraron con los relojes suizos que los astronautas llevaban en sus muñecas.

El resultado es siempre un objeto único, que proporciona un toque de distinción a quien lo lleva o a quien lo escoge como regalo para una ocasión especial.

La próxima vez que pienses en la expresión «el tiempo es oro», recuerda que tienes a tu alcance la maquinaria más perfecta y bella para señalar el paso de las horas: un reloj suizo de alta gama.